foto de AFP), pillado la semana pasada disfrutando de un encuentro amoroso en una de las playas de Miami Beach con la mujer a quien -según ha confesado- “quiero…desde que la vi supe que me gustaba” y agregó que "nunca voy a pedir perdón por amar a una mujer''.
En cuanto al matrimonio dijo que no se apresuraría, pero no ocultó que quiere ‘‘tener una familia y al mismo tiempo servir a Dios''. La información de prensa y la misma confesión del cura Cutié, desató, una vez más, la polémica sobre el tema del celibato sacerdotal. La Biblia, edición Nácar Colunga (que todo buen católico debe tener, leer y obedecer día a día una) dice al respecto de este tema, en palabras del apóstol Pablo en su carta a Tito: “Te dejé en Creta para que acabases de ordenar lo que faltaba y constituyeses presbíteros en la forma que ordené. Que sean irreprochables, maridos de una sola mujer, cuyos hijos sean fieles, que no estén tachados de liviandad o desobediencia” (Tito 1:5,6). La institución del matrimonio fue estatuida por el mismo Dios, tras darle a Adán una compañera, según podemos leerlo en Génesis 2:23,24.
La Iglesia Católica se apartó de lo establecido por Dios y en una decisión humana –no divina-, tomada en el siglo XVI<> , en el Concilio de Trento (1545 - 1563), decretó de manera definitiva el celibato sacerdotal obligatorio como se le conoce en la actualidad, como reacción a la Reforma protestante, que aceptaba y promovía, el matrimonio de los curas.
Viendo lo establecido por el mismo Dios y lo que estableció la Iglesia Católica, ¿cuál debe ser el camino a seguir por el cura el cura Alberto Cutié?:
1. Olvidarse de su novia.
2. Dejar el sacerdocio y casarse.
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